Joel Soñora y su situación en Talleres: “Si me quedo, daré todo”
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Fue de las caras “nuevas” que mostró el reinicio de los entrenamientos presenciales del plantel de Talleres. Se trata de Joel Soñora, quien estuvo a préstamo en Arsenal de Sarandí junto con Nicolás Giménez (ahora se fue al Baniyes de Emiratos Árabes por un año) para demostrar lo que se esperaba de él en el club de barrio Jardín.
Tuvo continuidad, logró convertir y consiguió gran participación en el juego del equipo de Sergio Rondina. ¿El detalle? Jugó 19 partidos, anotó cuatro goles y dio tres asistencias. Ahora Soñora espera saber si seguirá o no, aunque tiene la sensación de que la valoración que tendrá será distinta de cuando vino de Boca. En su momento, partió de Talleres porque en los últimos tiempos lo consideraban como lateral. Ahora, el panorama es distinto.
“La vuelta era lo que tanto esperábamos. Estamos contentos, pero también tenemos la incógnita de saber cuándo se determinará la vuelta al juego. Estoy con la expectativa de que armen un protocolo para jugar o el mismo calendario en el que se conozca la manera que tendrá el fútbol argentino. Hasta ahora nos estamos entrenando en lo físico”, dijo Soñora, quien es parte de los 24 jugadores que volvieron desde el lunes pasado al predio Amadeo Nuccetelli.
–¿Está bien que el fútbol haya estado confinado 150 días y vuelva ahora que hay pico de contagios y de muerte?
–Soy de los que piensan y de los que buscan el ejemplo de otros países que salieron adelante y supieron convivir con el virus, por más que hayan tenido más muertos y demás. Soy de los que piensan que la vida sigue y que cada uno tiene que salir adelante y afrontar esto, obviamente con los cuidados necesarios. Obvio que estoy en desacuerdo con las decisiones anteriores en las que había que cerrar todo.
–¿Cómo y con quién pasaste al cuarentena?
–Estuve cuatro meses y un poco más en casa y con mi familia. Se hizo más difícil. Allá había más controles y el nivel de contagios era superior. Acá llegué hace tres semanas. Hice la cuarentena y después esperé la fecha de regreso.
–En Arsenal fue lo mejor que se te vio…
–Me sentí importante en el plantel. Ahora me tocó volver acá a Talleres. Todavía no sé qué va a ser de mi futuro. Sea lo que sea, le voy a meter para adelante. Veremos qué es lo que pasa.
–Te sentís otro jugador, ya no aquel “lateral”…
–Acá sería tenido en cuenta como lateral. Se dio la posibilidad de ir a jugar a Arsenal en mi posición y aproveché muchas de las oportunidades que tuve. Me hubiera gustado tener muchas más, pero creo que, en líneas generales, hice un buen campeonato. Mi fuerte es pisar el área contraria, no tanto defender. En Arsenal pude jugar en un puesto en el que llegaba mucho en ataque y con mucha participación en el juego del equipo. Jugué más que lo que corrí. Por eso creo que pude cumplir una buena temporada.
–¿Hablaste con el entrenador Alexander Medina o con el presidente Andrés Fassi?
–Por el momento nada. No tengo ni idea. Ya me tocará hablar con el entrenador.
–¿Te ilusiona una nueva chance en Talleres?
–Te soy sincero. Pienso en que pongan una fecha de reinicio del torneo. Esta incertidumbre me tiene como loco. Esperaremos. Si me quedo, daré todo y pelearé el puesto. Falta un montón. Dependerá de varios factores y no me quiero precipitar. Ojalá se dé. Talleres es un gigante. La mitad de Córdoba es simpatizante del club y eso te motiva a jugar, pero todavía nadie del club se comunicó conmigo.
Su lugar y Estados Unidos
¿Qué lugar puede tener el mediocampista en el equipo del “Cacique” Medina?
Si Talleres estuviera en la fase tres del protocolo sanitario y las prácticas de fútbol fueran posibles, el ex-Boca podría ser utilizado en tres funciones: doble volante central, enganche o media punta.
Rondina lo utilizó así en el equipo del Viaducto, como titular o desde el banco de suplentes. Pero el préstamo venció y no hubo recursos para hacer uso de la opción del pase del jugador que retornó a Talleres.
“Veremos qué campeonato se da. Es todo muy incierto. Ojalá pueda ser útil”, comentó el volante, quien nació en Estados Unidos (nació allí, ya que su padre, Diego “Chiche” Soñora, jugaba en esa plaza) y guarda la chance de poder jugar en aquel seleccionado. “Si me llaman de la selección de Estados Unidos, voy a ir seguro”, cerró.
El plantel arribó el domingo a la noche para el partido por Eliminatorias de este martes. Cada jugador se mostró con su tubo personal para contrarrestar la altura de La Paz.
El Cuti Romero bajó del micro con su tubo personal.
La Selección Argentina llegó este domingo a la noche a Bolivia para el compromiso del martes a las 17, correspondiente a la segunda fecha de las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial 2026.
Más allá de la posible ausencia de Lionel Messi, la formación y las cuestiones futbolísticas, el principal objetivo del plantel es minimizar el impacto de los 3.600 metros de altura de La Paz, la capital boliviana.
Es por eso que una de las imágenes que más llamó la atención fue el arribo de cada jugador argentino con su propio tubo de oxígeno. La Selección sabe que no es sencillo predecir cómo puede responder el organismo de cada uno para el encuentro en el estadio Hernando Siles.
En el video se puede ver a Messi, en este momento duda para ser titular en La Paz, descendiendo del colectivo detrás de Cristian “Cuti” Romero. El cordobés ex-Belgrano fue uno de los que portaba un tubo de oxígeno de mano.
Además, minutos antes, futbolistas como Alexis Mac Allister y Nicolás Tagliafico mostraron el elemento en sus redes sociales. La falta de aire la suelen experimentar aquellos que suben desde el llano, y la idea es aclimatarse lo antes posible.
El plan de los tubos no es nuevo ni único de la Selección Argentina. Por caso, en las últimas Eliminatorias para Qatar el equipo dirigido por Lionel Scaloni utilizó la misma estrategia, y salió bien. El 13 de octubre de 2020, el conjunto nacional venció 2-1 a Bolivia y cortó una racha de 15 años sin triunfos en la ciudad del Altiplano.
Así son y cómo se usan
Esta vez los argentinos llegaron a La Paz con sus tubos personales, a diferencia de los grandes cilindros que se vieron años anteriores. Permite inhalar a una pureza del 95 por ciento cuando siente la necesidad.
Los tubos de la Selección son de la marca estadounidense Boost Oxygen, que dependiendo del tamaño brindan entre 60 y 200 descargas. De hecho vienen con distintos “sabores”: natural (el que se pudo ver en manos de los futbolistas), menta, pomelo rosado y eucalipto.
Según indica la página oficial del producto, el aire a nivel del mar tiene un 21% de oxígeno y los tubos descargan al menos tres veces más que eso.
Los tubos de oxígeno se utilizan tal cual mostró Mac Allister en sus redes: con la mascarilla debajo de la nariz y cubriendo toda la boca.
Fue 1-0, en el arranque del torneo clasificatorio rumbo al Mundial de 2026. La Selección inició en forma exitosa su camino hacia la cita ecuménica y vivió una fiesta ante más de 80 mil personas.